Húmeda de vida
mi voracidad se contonea
como la naturaleza
que la libido habita,
como el fuego que contamina
las venas de deseo,
el baño de verso
y el cuerpo de caricias.
En llamas
habla tu intención,
lamiéndome el corazón
y las entrañas,
genocidio en aguas
que nos tejen
la sangre, sus peces
y la pasión que fragua.
Jadeante cabalga
mi potra embravecida,
mi niña consentida
y mi ternura malvada,
dejando salada
la voz de tu saliva
que inquietante respira
mi geografía mojada.
Esencia
mi voracidad se contonea
como la naturaleza
que la libido habita,
como el fuego que contamina
las venas de deseo,
el baño de verso
y el cuerpo de caricias.
En llamas
habla tu intención,
lamiéndome el corazón
y las entrañas,
genocidio en aguas
que nos tejen
la sangre, sus peces
y la pasión que fragua.
Jadeante cabalga
mi potra embravecida,
mi niña consentida
y mi ternura malvada,
dejando salada
la voz de tu saliva
que inquietante respira
mi geografía mojada.
Esencia
Hola Esencia, con tus versos llenas de esencia
ResponderEliminaresencia que derramas jadeante cabalga tu potra
enbravecida, sobre la arena mojada de belleza
a raudales tus letras contaminan. Gracias...
Un abrazo
Ángel-Isidro.
http://elblogdeunpoeta.blogspot.com/
Una exquisitez tu blog , asi como tu poema, es un enorme placer volver a reencontrarme con tus letras, recibe mi más cálido abrazo, estimada amiga.
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