Tómame entre las comisuras de tus labios,
abriéndome el palacio de tus besos,
humeante y sediento su abecedario
escríbeme sin espacios en su verso.
Húndeme apretada a los aromas
donde la soga que a tus sentidos
sueltan el biorritmo que te zozobra
latiendo bajo la toga del sin prejuicio.
Muérdeme en el hambre que te late,
saborea cada parte que te entrego,
para soñarme fuego en derrame
sobre las calles de tu propio cuerpo.
Siénteme recorrerte cual humo
exrpimiendo los jugos del momento,
dejando suelto el hipnótico susurro
haciéndonos uno donde los dos nos encontremos.
Esencia
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